La situación del derecho al aborto en Colombia (por Viviana Bohorquez)

viernes, 17 de diciembre de 2010

El derecho al aborto (o a la últimamente más conocida como "interrupción voluntaria del embarazo") es uno de los ejes principales en nuestra lucha por aumentar y mejorar los derechos sexuales y reproductivos de las mujeres. Como sus cuestiones éticas, políticas y legales suelen levantar grandes pasiones a favor y en contra, distintas personas expertas en el tema irán analizando algunas de las vertientes que lo tocan, centrándonos sobre todo en la situación colombiana.
Esta vez contamos con la participación de Viviana Bohorquez, abogada y activista colombiana, que hace un directo, claro y conciso análisis de la situación legal actual en Colombia respecto a este tema. Para leerlo, cliken en el título de esta entrada.
También les dejo un enlace a un artículo del periódico español El País, donde se recogía la situación en la lucha por la despenalización del aborto en varios países de América Latina y un pequeño editorial que complementa el anterior.
Artículo de El País: despenalización del aborto en América Latina
Aborto en América Latina. Pablo Heras. Amnistía Internacional
Por mi parte, y como feminista, creo que el aborto es un DERECHO que debe ser ejercido de manera LIBRE, SEGURA Y GRATUITA por todas las mujeres que así lo decidan. O, usando el lema del último plantón en la campaña por su despenalización (28 septiembre 2010, Bogotá): "LAS MUJERES DECIDEN, LA SOCIEDAD RESPETA, EL ESTADO GARANTIZA".


El aborto y sus limitaciones en Colombia

 Por Viviana Bohórquez – Abogada y activista  

Hace ya casi cinco años las colombianas tuvimos el honor de celebrar, gracias a la Corte Constitucional, que fuera permitido el aborto en al menos tres circunstancias extremas[1]. Sin embargo, desde hace casi dos años hemos tenido que pasar tragos amargos en nombre del Procurador general de la Nación, Alejandro Ordoñez[2],  quien desde su posesión ha dejado muy claro que no puede diferenciar sus deberes en la esfera pública y sus convicciones religiosas (radicales y dogmáticas).  
El actual Procurador ha marcado su agenda en contra del derecho al aborto, la población LGBTI, el consumo de droga y, en general, del goce de las libertades individuales y colectivas hasta el punto de demandar la nulidad de cada decisión publicada por la Corte Constitucional, una de las pocas instituciones democráticas en Colombia que han logrado el avance de los derechos humanos en los últimos años. En tal sentido, parte de los esfuerzos de las feministas, organizaciones de mujeres y de derechos humanos ha sido contrarrestar la agenda del Procurador, siendo así un juego de acción – reacción que genera un desgaste al centrar los esfuerzos en evitar retrocesos en los derechos y dificulta por ende el avance en la materialización de los derechos de las mujeres.
A puertas de terminar el  año 2010, podemos hacer un balance positivo y negativo de las “batallas jurídicas” bien lideradas a favor del aborto. Batallas vencidas: 1).  la implementación de campañas masivas de derechos sexuales y reproductivos, incluida información sobre la Interrupción Voluntaria del Embarazo[3]; 2). La Corte que le llama la atención al Procurador por sus actuaciones en contra de los derechos de las mujeres y el acceso al aborto mediante auto[4]. 3).  El reconocimiento del aborto como derecho fundamental[5].  Dentro del balance negativo se encuentra la sanción que tuvo que levantar la Corte Constitucional a  un médico que se negó a realizar un aborto a una menor víctima de violación con síndrome de down, quien finamente tuvo que llevar a término el embarazo. Si bien por vía de tutela[6] (conocida  como acción de amparo) inicialmente el médico fue condenado a pagar indemnización a la menor, por impulso del Procurador se declaró la nulidad del fallo y se amparó la objeción de conciencia a favor del médico.  De igual forma, a menos de una semana de conocerse la sentencia que reconoce el aborto como derecho fundamental, la Procuraduría presentó demanda de nulidad por considerar que dicha interpretación va en contra del derecho a la vida. La acción de nulidad demorará al menos 8 meses para obtener decisión definitiva de la Corte, donde esperamos se mantenga en su posición progresista.   
El importantísimo reconocimiento del derecho al aborto como derecho fundamental se ajusta a los parámetros discutidos en conferencias internacionales sobre derechos humanos de las mujeres. Sin duda, es una conquista elevar a rango constitucional las decisiones de las mujeres sobre el derecho a elegir ser madre, la autonomía sobre su cuerpo y la libertad de elegir un proyecto de vida en condiciones de igualdad. El desafío más grande, entonces, es empoderar a las mujeres colombianas en el ejercicio del derecho al aborto como una opción y no como una obligación, como quieren venderlo algunos grupos dogmáticos.
El enfrentamiento entre la Corte Constitucional y el Procurador General es una constante jurídica en Colombia que se disputa entre deseos y convicciones: el deseo de la Corte de lograr avances de los derechos sexuales y reproductivos de las mujeres y la convicción religiosa del Procurador de  interpretar de manera absoluta el derecho a la vida.  Mientras tanto, las menos beneficiadas de las disputas jurídicas son las mujeres, con serias limitaciones frente al acceso a la información y el acceso a los servicios de salud de manera oportuna y digna. 
Mientras persiste el discurso religioso anti-derechos, no existen cifras oficiales sobre aborto legal o ilegal en Colombia, que permitan dar cuenta sobre la problemática en términos de salud pública. Una mirada rápida hacia al pasado, desde la experiencia de varios países en el mundo, confirma que la defensa de los derechos sexuales y reproductivos es una tarea marcada constantemente por grandes triunfos y desafíos. Así, lo que en un día se gana, al día siguiente se puede perder, en especial cuando se trata del derecho de las mujeres a interrumpir de manera libre su embarazo. Finalmente, las leyes a favor de los derechos sexuales y reproductivos de las mujeres (al igual que las sentencias) traen consigo sus propias limitaciones en la transformación social, a tal punto que es muy difícil medir el impacto en la vida real de las mujeres.  El derecho es tan sólo un medio legitimador en el momento de decidir sobre el cuerpo y la maternidad que, lamentablemente, es utilizado como herramienta en contra de los deseos de nosotras como mujeres y nuestro deseo o no de ser madres.


[1] La Corte Constitucional de Colombia, Sentencia C-355 de 2006, declara constitucional la interrupción del embarazo en tres circunstancias: “(i) Cuando la continuación del embarazo constituya peligro para la vida o la salud de la mujer; (ii) Cuando exista grave malformación del feto que haga inviable su vida; y, (iii) Cuando el embarazo sea el resultado de violencia sexual.
[2] Alejandro Ordoñez, su prontuario es miedoso. Se puede resumir así: 1. Integrante de la organización "tradición, familia y propiedad", movimiento ultracoservador que tuvo mucho auge años atrás. Enemigo de comunistas, masones y librepensadores.  2. Enemigo de los derechos de las mujeres, está en contra del aborto en casos excepcionales y en cualquier otro caso. 3. Enemigo de la población LGBT y de las uniones de parejas del mismo sexo. 4. Enemigo de la libertad de expresión, demandó a la revista SOHO por la fotografía de la última cena donde la modelo Alejandra Azcarate era Jesús. 5. Enemigo de las libertades públicas, en especial, del derecho a la dosis personal de droga.  (…) 8. Tiene un libro llamado "el libre desarrollo de la animalidad" en el cual critica el derecho al libre desarrollo de la personalidad, y nos dedica un capítulo entero de verborrea discriminatoria, en el cual aborda el tema de las parejas del mismo sexo. Blog: www.malbarracin.com
[3] Corte Constitucional de Colombia, Sentencia T- 388 de 2009.
[4] Los autos los utiliza generalmente la Corte para resolver cuestiones con entidad procesal y/o sustantiva posterior a las sentencias de tutela o amparo.
[5] Corte Constitucional de Colombia, Sentencia T-585 de 2010.
[6] La acción de tutela o amparo es un mecanismo sencillo mediante el cual cualquier persona puede solicitar la protección de sus derechos fundamentales reconocidos en la Constitucional ante cualquier juez de la república.

1 comentarios:

Anónimo dijo...

http://www.youtube.com/watch?v=JW94nyA9RC4

Este es el "derecho" por el que tanto lucha...